De vez en cuando te pienso.
A veces me parece cruzarte por la calle y me imagino tu actitud: soberbio, vanidoso, genial.
Una locura exquisita e inentendible para muchos.
Será que cuando estás despierto yo estoy dormida, será que no te vas a ir más de acá.
Cada cúal en su propia trama, en su propio río.
Hay un tiempo tántrico espiando desde la escalera, mientras se nos resbalan los días,
mientras el sol tiene su ocaso.
Yo no me olvido del vértigo.
Y era mirarte y pensar, pensar que yo también podía ser enorme
Pero estoy en calma, el faro dejó en penumbras las sombras, mis tempestades retozan al sol.
Un sinfín de verdades tras de mí, me esperan agazapadas en los días que vendrán.
Voy de a poco, con las distancias entre mis pasos y las paredes lejos.
Me tomo de a litros toda esta vida y brindo por el recuerdo de tu luz.
A veces me parece cruzarte por la calle y me imagino tu actitud: soberbio, vanidoso, genial.
Una locura exquisita e inentendible para muchos.
Será que cuando estás despierto yo estoy dormida, será que no te vas a ir más de acá.
Cada cúal en su propia trama, en su propio río.
Hay un tiempo tántrico espiando desde la escalera, mientras se nos resbalan los días,
mientras el sol tiene su ocaso.
Yo no me olvido del vértigo.
Y era mirarte y pensar, pensar que yo también podía ser enorme
Pero estoy en calma, el faro dejó en penumbras las sombras, mis tempestades retozan al sol.
Un sinfín de verdades tras de mí, me esperan agazapadas en los días que vendrán.
Voy de a poco, con las distancias entre mis pasos y las paredes lejos.
Me tomo de a litros toda esta vida y brindo por el recuerdo de tu luz.
